El día de ayer miércoles justamente entre las calles 6 de abril y Coahuila Isaac se trasladaba en su bicicleta sin imaginar que ese día y ese momento le diría adiós a este mundo tan insensible por una bala perdida.
Tenía una gran vida por delante, un joven deportista que buscaba sobresalir en esta ciudad tan sangrienta, tan insegura donde las personas desaparecen todos los días donde existe una cifra de personas asesinadas y donde la inseguridad manda.
Isaac fue un gran ciclista con tan solo 25 años de edad. El mes pasado acababa de recibir su cédula profesional de Licenciado en Negocios Internacionales, y comenzaba su vida laboral, regresaba del trabajo cuando fue asesinado.
Este es el nuevo Cajeme, donde cualquiera ser vivo corre peligro sin importar género o edad, donde las funerarias todos los días están llenas y la justicia no existe.
Los padres quedan destrozados e inconsolables. En esto se ha convertido Cajeme el triste y nuevo futuro de nuestros hijos.
Descansa en paz, Isaac. Vuela alto