El presidente Andrés Manuel López Obrador no descartó que, una vez que se acabe la corrupción y se vuelva hábito la honestidad en México, se aumenten los impuestos, sin embargo, aclaró que por el momento estos no subirán. En La Mañanera, el mandatario señaló que los apoyos siempre se van a dar a las personas que más lo necesitan, ya que de eso se trata la justicia; “no puede haber trato igual entre desiguales”, dijo.
Explicó que, sin importar si se trata del norte, centro o sur del país del país, hay que buscar que la población se sienta bien. “Vamos a seguir limpiando de corrupción, vamos a volver hábito la honestidad y luego se ve si se aumentan los impuestos, y luego se ve si hay una distribución distinta en el ingreso, pero primero no permitir la corrupción y hacer gobiernos austeros”, dijo.
Recordó que la distribución de los recursos se da gracias a un pacto federal que se convirtió en la Ley de Coordinación Fiscal aceptada por todos, distribuyendo los fondos recaudados tomando en cuenta la población, la pobreza y el crecimiento o los ingresos del estado. Sin embargo, hizo un llamado a los gobiernos estatales para implementar planes de austeridad, ahorrar y no gastar en cosas banales para garantizar los servicios básicos a la población.
Insistió en que “la honestidad es la mayor riqueza de México”. “La mejor forma de que haya una buen distribución de esa riqueza es que haya equidad, que haya justicia y desde luego que no haya corrupción. Porque si no hay corrupción lo mucho o poco que se tiene se distribuye mejor, o alcanza para lo indispensable”, reiteró.
