En Inglaterra, Millie Taplin, de 18 años, aceptó una bebida que le ofreció un desconocido en su primera ida a un centro nocturno.Después de 10 minutos de haber tomado la bebida, comenzó a sentirse mal: “tomé un par de sorbos de la bebida y fui al área de fumadores. Regresé y sentí que había bebido demasiado, y luego salí a la calle para vomitar”, dijo, a lo que sus amigos y hermana mayor decidieron llevarla inmediatamente al hospital.
Los doctores descubrieron que le administraron a la joven dos medicamentos: uno para paralizarla y otro para noquearla.
La madre de Millie decidió subir el video de su hija, quien parecía estar congelada sin poder hablar ni caminar durante 4 horas, esto para crear conciencia en otras jóvenes.