Luego de que el Capitolio de los Estados Unidos fuera evacuado por la violenta irrupción de simpatizantes del presidente Donald Trump, el congresista republicano Mike Gallagher pidió al presidente de los Estados Unidos hacer un llamado al orden, mientras Muriel Bowser, la alcaldesa de la ciudad de Washington, DC, ordenó un toque de queda a partir de la 6 de la tarde de hoy. “¡Cancela la protesta, la elección terminó!”, dijo Gallagher, congresista por Michigan, a una cadena de televisión local.
Por su parte, el Presidente respondió hace unos minutos en su cuenta de Twitter con el mensaje: “Pido a todos en el Capitolio de los Estados Unidos que permanezcan en paz. ¡Sin violencia! Recuerde, NOSOTROS somos el Partido de la Ley y el Orden: respete la Ley y a nuestros grandes hombres y mujeres de Azul. ¡Gracias!”. Horas antes, Trump había pedido al vicepresidente Mike Pence que frenara el proceso de certificación de los resultados electorales. Pese al llamado, que se antoja tardío, imágenes de televisión mostraron a una mujer siendo sacada en camilla del capitolio, con sangre en el pecho y cuello.
En otra fotografía se mira a uno de los seguidores del Presidente posa victorioso sentado en la silla del presidente del Senado y en una secuencia más se mira como una turba rompe cristales de ventanas en el Congreso para ingresar en el mismo. Los medios en los Estados Unidos ya mencionan la palabra “insurrección”, para referirse a las protestas de esta tarde, inéditas en la historia de los Estados Unidos.