Marisela Escobedo murió tres veces. La primera en 2008, cuando mataron a Ruby Marisol Frayre , su hija de 16 años. Asesinada por su novio, Sergio Rafael Barraza, Rubí fue una de cientos de adolescentes que matan cada año en ciudad Juárez Chihuahua, México , ciudad fronteriza con estados unidos , conocida en todo el mundo por la ola de feminicidios que había ahí desde los años 90 y que ahora se expande por el resto del país .
La segunda vez que Marisol murió fue cuando, en un veredicto incomprensible, la justicia absolvió al asesino de Rubí. La tercera fue su propia muerte, en 2010, cuando recibió un balazo en la cabeza mientras exigía justicia frente al palacio de Gobierno de Chihuahua. Llevaba durmiendo ahí nueve días, los asesinatos, tanto el de la hija, como el de la madre, quedaron impunes.